Una vez al año en las selvas de la Orinoquía y el Amazonas colombiano brota de manera natural una cosecha de la nuez “Caryodendron Orinocense”, que da origen al nombre de nuestra marca: CaryO.
Desde tiempos ancestrales las comunidades indígenas utilizaban este fruto para el cuidado de su piel y el tratamiento de las heridas.
Hoy en día, de esta nuez se extrae de forma sostenible un aceite, conocido en el mercado como Aceite de Cacay, que, gracias a sus propiedades regenerativas y antioxidantes, es uno de los más apetecidos y exclusivos de toda la industria cosmética.
El aceite es posiblemente el más rico del mundo en contenido de Retinol, un derivado de la vitamina A que sirve para estimular la producción de colágeno y ácido hialurónico, obteniendo así un efecto rejuvenecedor en menos de cinco semanas. Asimismo, contiene altos niveles de vitamina F y vitamina E, sustancias que son altamente eficaces para tratar las manchas de la piel, hidratar y controlar el acné.
Gracias a su alta concentración de omegas 3 y 6, el aceite logra llegar a las capas más profundas de la piel para que luzca sana y luminosa.
También, es perfecto como tratamiento capilar, sirve para mantener el pelo suave, sedoso y brillante, porque lo nutre con intensidad, hidrata y ayuda a prevenir su caída. Se puede utilizar como mascarilla aplicándolo desde la raíz o como acabado para prevenir la horquilla después del lavado.
Otra de las muchas funciones del Cacay es el fortalecimiento y la hidratación de las uñas, muchas veces dejamos de lado su cuidado debido a que nos preocupamos más por el pelo y la piel, sin embargo, el aceite ayuda a mejorar el aspecto de las uñas y potencia su crecimiento. Es necesario aplicarlo sobre la cutícula, con las uñas limpias y sin esmalte.